EL ENEMIGO DEL CRISTIANO NO ES EL DIABLO

 

GENESIS 2: 15-17

15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase.

16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer;

17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.

 

EL ENEMIGO DEL CRISTIANO NO ES EL DIABLO

ES LA NATURALEZA PECAMINOSA

 

INTRODUCCION.

1. CUANDO DECIMOS EL ENEMIGO DEL CRISTIANO PENSAMOS EN EL DIABLO

2. EL DIABLO SOLO LE OFRECIO A EVA QUE COMIERA Y EVA LE DIO DE COMER ADAN

3. EL ENEMIGO DEL CRISTIANO NO SON LAS SECTAS

4. EL ENEMIGO DEL CRISTIANO ES SU MISMA CARNE

 

1) LA CARNE ES EL PRINCIPAL ENEMIGO DEL CRISTIANO

ROMANOS 8: 13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.

 

A. HAY CRISTIANOS QUE LO QUE MAS ALIMENTAN ES LA CARNE

B. LO MISMO QUE DIOS LE DIJO A ADAN DICE ACA LA ESCRITURA

 

2) LA CARNE PIENSA EN LAS COSAS DE LA CARNE

ROMANOS 8:5 Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.

 

A. NO EXISTE EL TERMINO DE CRISTIANO CARNAL

B. SI EXISTE LA DEFINICION QUE ES USTED CARNAL O ESPIRITUAL

 

3) LA CARNE ES DÉBIL

MATEO 26:41 Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está  dispuesto, pero la carne es débil.

 

A. LA PALABRA NOS DA DOS FUENTES 1. ES VELAR Y LA 2. ES ORAR

B. CUANDO NO APLICAMOS ESTAS DOS COSAS ES CUANDO SUCUMBIMOS

 

4) EN NUESTRA CARNE NO MORA ÉL BIEN

ROMANOS 7:19-20

19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.

20 Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí.

 

A. CRISTIANOS CON BUENAS INTENCIONES PERO CON MALAS DECISIONES

B. CRISTIANOS CON GIGANTES DORMIDOS POR DENTRO

 

5) LA CARNE NO PUEDE HEREDAR EL REINO DE DIOS

1 CORINTIOS 15: 50 Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción.