JESÚS ES EL ABOGADO QUE TODOS NECESITAMOS

 

JESÚS ES EL ABOGADO QUE TODOS NECESITAMOS

 

1 JUAN 2: 1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.

 

INTRODUCCIÓN.

1. JESÚS COMO NUESTRO ABOGADO ES COMPASIVO

2. JESÚS COMO NUESTRO ABOGADO ES EMPÁTICO

3. JESÚS COMO NUESTRO ABOGADO ES TE ACOMPAÑA

4. JESÚS COMO NUESTRO ABOGADO ES TE INFUNDE CONFIANZA

 

1) PORQUE LA NECESIDAD DE UN ABOGADO

 

A. POR NUESTRA NATURALEZA PECAMINOSA

SANTIAGO 1: 14 sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido.

B. EL PECADO ES LO QUE ROMPE NUESTRA COMUNICACIÓN PARA CON DIOS

ISAÍAS 59: 1-2

1 He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír;

2 pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.

C. PORQUE SATANÁS NOS ACUSA DE DÍA Y DE NOCHE

APOCALIPSIS 12: 10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche.

 

2) JESÚS ES NUESTRO ABOGADO A NUESTRO FAVOR

 

A. JESÚS SE PRESENTA POR NOSOTROS

HEBREOS 9: 24 Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;

B. JESÚS ES NUESTRO INTERCESOR

HEBREOS 7: 24 por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.

C. LA CONFESIÓN SIEMPRE TERMINA EN BENDICIÓN

1 JUAN 1: 9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.

 

3) JESÚS ES NUESTRO ABOGADO MISERICORDIOSO

 

A. LA COMPASIÓN DE JESÚS ES ESPECIAL

HEBREOS 4: 15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.

B. JESÚS ES NUESTRO ABOGADO PACIENTE ANTE NUESTRA DEBILIDAD

2 PEDRO 3: 9 Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.